El fin de semana pasado subimos al centro de esquí que hay en la zona. Las chicas iban a esquiar, a mi todavía no me convence la cosa, así que preferí salir a huevear, camnar, sacar fotos o tomar café.

Pero la vida quiso que terminara subiendo al plateau nuevamente, y esta vez en una moto de nieve!! Uff, vaya experiencia! Fotográficamente hablando, digamos que se complicó ya que nuevamente había tormenta de nieve arriba (se podría decir “mala suerte” ya que suelen ser más los días lindos que los tormentosos), pero por otro lado la tormenta le da una ondita de “uyyyyyyy” al paseo que está buena y a las pocas fotos también algo de expedición.

Como les decía, sigue siendo un invierno muuuuy nevado en mis fotografías, vaya uno a saber por qué. Y, si todo va bien, esto no es lo último, hay bastante nieve más!

abrazo