Situación típica.
Lente nuevo, en este caso comprado pensando en la fotografía de aves. Así como me llega el lente me quedo sin cámara. Y cuando vuelve la cámara, me quedo sin aves.
Ok, si, es otoño, no hay muchas, pero nada? Ni una?
No, por suerte apareció este Cinclodes, de la nada, cuando ni sol había, como para darme un ratito de práctica. No mucha, pero lo suficiente.
Gracias remolinerita!