Horas buscando libros y notas de fotografía para leer. Avidez de aprender, de encontrar secretos, trucos; la varita mágica de la composición, de la luz perfecta…Todo para intentar lograr que las fotos sean como uno las imagina y no como las ideó la cámara.
Encuentro uno, lo bajo, lo imprimo. La impresora escupe tinta a lo bobo, las fotos quedan horribles pero el texto se entiende, alucino. Lamento que esos libros acá no se consigan y, en caso que llegaran, lo hacen al 400% del precio de origen. Habla de fotografía de naturaleza, algunas cosas básicas pero otras no tanto.
Hace dos miércoles, al salir de Tai Chi, fui a caminar con un amigo al Parque Nacional Lago Puelo. Como siempre, cargué la cámara con el 70-300, pues nunca se sabe; no sea cosa que deje la cámara en el auto y justo en medio de la caminata venga el cóndor que estoy esperando hace tiempo, aterrice a 10 metros y baile un carnavalito frente a mi o se me cruce la garza bruja del parque pero esta vez con un poco de onda amigable y pose para la foto. Como no se sabe qué puede pasar en todas las caminatas llevo la cámara y el lente con el que suelo fotografiar aves. Y esta vez fue así. Pero no hubo aves, los 5 grados bajo cero las habían alejado, pero si había unos trozos de hielo impresionantes. Essos que se forman cuando se suman las heladas fuertes de esta época del año.
Como venía con mi amigo dejé pasar uno, y otro y otro y no podía creer los bellos dibujos que se veían. A los 10 minutos no lo soporté más, saqué la cámara y fotografié tres a pulso. Luego volvería. De vuelta en el auto nos despedimos y yo encaré hacia la zona de hielos. Seguía haciendo un frío de locos y mi ropa estaba empapada de transpiración. Miré una vez, seguí andando, miré otros… pero temiendo quedar patitieso de frío decidí volver el viernes y dedicarme solamente a eso.
El viernes no estaban más, se habían evaporado.
Y hoy, una semana después veo las fotos.
Y pienso que el trípode estaba en el auto, el lente macro también y podría haber sacado unas fotazas. Pero no, tal como lo anunciaba el libro de John Shaw, toda fotografía debe ser con trípode, es la única forma de ganar en definición, en calidad final. Por eso no debería subir esta foto, ya que está fuera de foco, movida y vaya a saber cuántas cosas más, pero lo hago para volver a verla de vez en cuando y acordarme que si voy a caminar voy a caminar y si voy a fotografiar me dedicaré exactamente a eso.
Pocas veces se pueden combinar ambas opciones. Y la foto lo demuestra.

Olas de hielo
Saludos y buen fin de semana.
Leo
Una maza pibe! jajaja
Tu admiradora y forofa
Uka